El mundo se está moviendo hacia una economía digital, y este cambio global está transformando la forma en que las empresas hacen negocios, sin importar la industria o el país en el que se encuentren. Las Islas Canarias no son una excepción. En los últimos diez años, las autoridades locales han estado liderando diferentes iniciativas no vinculadas, con el objetivo de establecer un ecosistema emprendedor, reunir ideas, talento, espacios y, a veces, incluso capital de financiación.
El compromiso privado es absolutamente necesario para que este ecosistema se fortalezca y crezca. El acceso a programas de aceleración y fondos privados como complemento de las incubadoras locales públicas dará lugar a una visión más competitiva y una industria de tecnología sólida.